Joven llega vivo a hospital y muere por falta de camillas

Un joven empleado dedicado al cultivo de espárragos en la empresa agroindustrial ‘Green Perú’ falleció ayer desangrado dentro de un patrullero policial mientras esperaba asistencia médica en la Unidad de Emergencia del hospital Belén, es decir, la víctima llegó viva al nosocomio y dejó de existir tras perder minutos valiosos debido a que ningún médico se dignó a auxiliarlo por falta de camillas hospitalarias.

Esta escabrosa historia ocurrió al promediar el mediodía cuando dos efectivos del Escuadrón de Emergencia Noreste de la Tercera Dirección Territorial Policial (Dirtepol) encontraron a Luis Eduardo Guevara Valiente (21) tendido en el suelo, sangrando y agonizando, tras haber sido salvajemente apuñalado en la espalda y pecho, en el polvoriento sector 1 de la avenida Los Laureles, distrito Florencia de Mora, a pocos metros del centro poblado menor Alto Trujillo.

En vista de ello, colocaron el cuerpo con vida del empleado agroindustrial en la parte posterior de la camioneta policial de doble cabina, identificada con placa de rodaje PL-7397, para evitar que se maltrate durante el trayecto y lo condujeron con rapidez al hospital Belén. Sin embargo, cuando llegaron a la Unidad de Emergencia de dicho establecimiento de salud, a las 12.20 de la tarde, los agentes del orden pidieron ayuda, pero ningún galeno les hizo caso ni atendió al herido, pese a que éste aún respiraba.

Llenos de indignación e impotencia, los policías de apellidos Vélez y Chunga empezaron a exigir ayuda a gritos, no obstante, diez minutos después de airados reclamos, el corazón de Luis Eduardo dejó de latir, ya que había perdido demasiada sangre en la tolva del patrullero.

Recién cuando el rumor de la muerte corrió hasta llegar a los oídos del personal de Emergencia, dos practicantes femeninas salieron empujando una destartalada camilla y colocaron el cuerpo sobre la tarima. Sin embargo, el obrero ya había fallecido, después de resoplar borbotones de sangre —tal y como lo constataron los hombres de prensa que lo vieron respirar—, mientras esperaba ser atendido para no morir.

Mayor PNP: “Sí, llegó vivo”

“El muchacho llegó vivo, respirando, al hospital. Aunque el teniente y el suboficial que lo recogieron estuvieron pidiendo camillas durante diez minutos, nadie les consiguió una. Incluso, la familia tuvo que llamar a la prensa para presionar mientras el chico se desangraba en el patrullero. Creo que si le hubieran colocado una mascarilla de oxígeno, no habría muerto tan rápido”, indicó a La Industria el jefe del Escuadrón de Emergencia Noreste, mayor Marcel Carbajal Tarazona.

Asimismo, el oficial reveló que la víctima presentaba profundos cortes de puñaladas por la espalda, pero aclaró que la necropsia determinará la profundidad de los mismos. “Además, los médicos estuvieron muy herméticos y solo se limitaron a enviarlo a la morgue, con la cara tapada con una sábana”, sentenció. De más está explicar que los familiares protagonizaron dramáticas escenas de dolor en la Unidad de Emergencia del Belén.

Carlos Flores Balarezo - Redacción - LaIndustria