Joven va al hospital por un tumor y le cortan hueso de pierna

La cura resultó peor que la enfermedad. Jonatan David Luján Quispe, un adolescente de 16 años de edad, jamás imaginó que un dolor de rodilla causado por un pequeño tumor quístico le costaría la escisión del hueso esponjoso en el fémur de su pierna izquierda y, por ende, la imposibilidad de volver a caminar bien, amén de la pérdida de tiempo para iniciar el tratamiento de una posible enfermedad neoplásica.

Esta dramática historia se remonta a los primeros días de abril cuando Jonatan comenzó a sentir insoportables dolores nocturnos, ardor e hincadas en el nódulo de la extremidad izquierda, motivo por el cual fue conducido de emergencia a la clínica Peruano-Americana. Ahí, el médico de apellido Saldaña le practicó una resonancia magnética e informó a los padres que el menor tenía un quiste, el cual debía ser sometido a una biopsia para descartar algún tipo de cáncer maligno o benigno.

No obstante, los escasos recursos económicos del hogar obligaron a la madre de Jonatan, Esther Quispe Caba (38), a llevarlo al hospital Belén para ser sometido a la toma de muestras del tejido tumoral. Sin embargo, en lugar de practicar la biopsia a la masa quística, el 11 de abril último los galenos del Belén Omar Horna y César Mimbela operaron al joven, efectuándole un corte incisional de cuatro gramos al hueso esponjoso de la rodilla izquierda para, supuestamente, detectar una posible oncología.

Pero lo sorprendente del asunto es que el 4 de mayo el Departamento de Patología del Belén emitió el informe 12-Q-1580 —que La Industria obtuvo en calidad de exclusiva—, en el cual se puede leer que “en la muestra examinada no se observa evidencia histiológica de neoplasia alguna”.

“Luego de la operación, los doctores Horna (traumatólogo) y Mimbela Bustamante (oncólogo) aseguraron que mi hijo ya no tenía nada, que estaba sano y curado. Encima, sugirieron que realice su terapia física en el consultorio de Omar Horna Rodríguez porque en Belén no había buenos equipos”, contó con el dolor empozado en el rostro la apenada madre de Jonatan.

Ilusiones perdidas
Dos meses después, los dolores persistían hasta que el 21 de junio los desesperados progenitores decidieron llevarlo al hospital de EsSalud Víctor Lazarte Echegaray, en donde fue atendido por el traumatólogo Edmun Ochoa Calderón, quien ordenó se practique una urgente tomografía a la rodilla del menor.

Cuando los resultados les fueron entregados, grande fue la sorpresa de los angustiados padres cuando el doctor Ochoa Calderón confirmó que el tumor continuaba enquistado en el óseo de la rodilla y, para colmo, había aumentado de tamaño. Esto fue confirmado ayer cuando La Industria consiguió el informe autogenerado 9603041LAQSJ008 del Servicio de Diagnóstico de EsSalud, en donde se puede leer que “se observan imágenes quísticas en condilos femorales izquierdos”, es decir, el tumor seguía ahí.

Carlos Flores Balarezo | Redacción La Industria