Equipo extranjero evaluará el riesgo en La Hermelinda

Trujillo. Un equipo de especialistas internacionales de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) llegará hoy a Trujillo para evaluar el estado del mercado La Hermelinda y los 12 centros de abastos colindantes, debido al riesgo de un eventual brote de peste bubónica por la presencia de ratas portadoras de la bacteria Yersinia pestis.

Así lo informó el gerente regional de Salud, Henry Rebaza Iparraguirre, quien además indicó que junto a los miembros de la OPS también arribará a la ciudad la coordinadora nacional de la estrategia contra la peste bubónica y representantes del Instituto Nacional de Salud (INS), como parte de las acciones de control establecidas ante el riesgo de una epidemia.

“A las 9 de la mañana tendremos una primera reunión en la sede de la gerencia de salud y luego ellos recorrerán el mercado para ver el estado en que se encuentra”, indicó el funcionario regional.

Agregó que, el Gobierno Regional ha destinado que 100 personas trabajen de manera perenne en la zona, mientras que el Ministerio de Salud (Minsa) dispuso el envío de una tonelada de Carbaril (insecticida para matar pulgas) que llegará también esta mañana hasta los almacenes de la sede del sector.

Justifica acciones

Con respecto a la desratización inesperada en el Corralón Los Rodríguez, un mercado instalado junto a La Hermelinda, ayer Rebaza Iparraguirre indicó que se aplicó la medida como reacción ante el uso de un veneno por parte de los vendedores de este mercado.

“Fue una decisión tomada ante un accidente, ya que encontramos que se había aplicado un raticida y frente a esa contingencia teníamos que corregir técnicamente la situación. En estos tres días hemos vigilado y bajo la comprobación en campo determinamos que se ha colocado un veneno tratando de ganar tiempo”, sostuvo el funcionario, quien precisó que al evaluar los roedores encontraron que el químico utilizado es distinto al que utilizan los funcionarios del sector.

Necesitan labor integral

Por su parte, la médico veterinario y doctora en salud pública, María Díaz Pinillos, descalificó la decisión del gerente de Salud y consideró que se tomó una decisión apresurada y sin el sustento técnico necesario, ya que antes de utilizar más veneno en la zona se tenía realizar un diagnóstico más preciso de la situación.

“No se ha trabajado técnicamente, sino que posiblemente reaccionaron porque estaban asustados. Ahora, lo que se debe hacer es un cordón sanitario (…) se necesita un trabajo integral con los tiempos necesarios, pues se debe esperar al menos siete días que es el tiempo promedio para matar a las pulgas”, señaló la especialista, tras indicar que la Gerencia de Salud debería invitar a las personas que “en algo” conocen el tema para ejecutar un programa técnico y planificado.