En el distrito de Miraflores, ubicado en la ciudad de Arequipa, un adolescente de 17 años que ya no pudo con la culpa, confesó a los efectivos de la Policía Nacional haber matado a su amigo y estudiante de 18 años de un disparo.
Cuando el caso fue denunciado a las autoridades, el menor de edad aseguró que un desconocido a bordo de su vehículo impactó de un balazo en la cabeza a su mejor amigo, mientras que jugaban con sus patinetas. “Me asusté y corrí a ponerme a buen recaudo, pero luego regrese a verlo”, señaló.
Los efectivos de la comisaría de Miraflores fueron quienes llegaron hasta la escena del asesinato, pero el caso pasó por la Unidad especializada en crímenes de la Divincri de Arequipa. Es ahí donde los detectives notaron que las declaraciones no coincidían con los resultados de las pericias como evidencias.
Testigos de la zona mencionaron a un medio local que desde un principio solo vieron a ambos jóvenes, en ningún momento escucharon que haya pasado algún auto, por lo cual se le citó nuevamente al sobreviviente, quien dijo toda la verdad.
“Encontré el arma de fuego en la torrentera que divide los distrito de Alto Selva Elegre y Miraflores. Ambos estábamos jugando a ser mafiosos narcotraficantes y luego le apunte en la cabeza, apreté el gatillo y se disparó, cayendo mi amigo muerto. Arroje el arma a la torrentera de Juan XXIII”, agregó el titular de la muerte, quien se encuentra en manos de la Fiscalía de Familia.
No hay comentarios: