Puno: adulto mayor acusado de robar murió golpeado y atado a un poste de luz

Fermín Velásquez fue acusado de ingresar a una casa y robar un balón de gas y otros objetos. El septuagenario, a quien le lanzaron agua y dejaron desnudo, murió durante la madrugada, aparentemente a causa de hipotermia.

El último miércoles, la urbanización Rosario Coñiri de Jayllihuaya, al sur de la ciudad de Puno, fue escenario de un acontecimiento trágico y violento que desencadenó la muerte de un adulto mayor.

Se trata de Fermín Velásquez Laquise, quien murió en las primeras horas de la madrugada de este jueves, después de ser capturado por los lugareños quienes lo acusaron de ser parte de un grupo de delincuentes que irrumpieron en una vivienda para robar.

Fuentes policiales informaron que el presunto ladrón, quien tendría alrededor de 70 años de edad, fue sorprendido por vecinos tras intentar llevarse un balón de gas, un panel solar, entre otros objetos. Los delincuentes habrían aprovechado que no había nadie en el predio para ingresar.

Hartos de enfrentar constantes robos y ante la ausencia de patrullaje policial y Serenazgo, los ciudadanos tomaron la justicia por su mano. Capturaron a Fermín, lo golpearon, lo desnudaron, le lanzaron agua fría y lo ataron a un poste de energía eléctrica donde permaneció por varias horas.

“Lo hemos alcanzado cerca del puente y lo hemos amarrado. El resto, sus cómplices, se escaparon por el lado del cerro”, apuntó una vecina de la zona a Exitosa Noticias.

Al amanecer del jueves, alrededor de las 07:00 horas, los lugareños encontraron al sujeto muerto, según informaron a la Policía Nacional (PNP). La intensidad del frío en la madrugada, que en Puno alcanza los 5 grados, podría haber contribuido a que desarrolle una hipotermia y fallezca.

La Policía y un representante del Ministerio Público llegaron al lugar para realizar las investigaciones pertinentes. En las fotografías compartidas por algunos medios locales, se observa al fallecido tendido en medio del pastizal y cubierto con una frazada.

“Ahora vemos (...) 15 policías (que) vienen a cuidar al ratero, entonces cuándo estamos así no viene ninguno. No viene Serenazgo ni siquiera viene la Policía”, declaró la lugareña.

Cabe mencionar que, los dueños de la vivienda a la que los ladrones ingresaron señalaron que hallaron huellas en el ingreso, las cuales corresponden con la zapatilla que el fallecido traía puesto.

“Los robos son casi a diario. No podemos dejar la casa sola”, expresó y añadió: “El lunes también hubo un robo; hemos llamado a la policía, pero nunca llegaron. Los delincuentes vienen en una camioneta y, en cuestión de 20 minutos, se llevan todo”, apuntó.