En un acto de violencia y humillación, el alcalde provincial de Pomabamba, Daniel Salomón Ocaña Alejo, fue agredido físicamente y obligado a caminar por las calles vestido con indumentaria femenina tradicional. Este hecho fue protagonizado por ronderos de las comunidades de Alpamayo y Cotocancha, quienes exigen el cumplimiento de un acuerdo previo para reemplazar a funcionarios cuestionados de la municipalidad.
En octubre, los ronderos sostuvieron una mesa de diálogo con el burgomaestre y sus regidores, solicitando la destitución de diversos funcionarios por presunta falta de capacidad. A pesar del compromiso asumido por las autoridades para realizar los cambios, los pobladores señalan que las rotaciones no se concretaron, lo que motivó estas acciones de protesta extrema.
El alcalde, de 63 años, sufrió una descompensación durante el incidente y fue trasladado al Hospital de Apoyo de Pomabamba, desde donde fue derivado a un centro médico de mayor complejidad para recibir atención especializada.
Las autoridades del Ministerio Público y la Policía Nacional han iniciado investigaciones por la presunta comisión de delitos como lesiones y secuestro, a fin de identificar y sancionar a los responsables. El burgomaestre señaló que varios cambios ya se han efectuado y que otros están en proceso.
La violencia y los actos que vulneran la integridad de cualquier autoridad o ciudadano son inaceptables y merecen ser condenados. Este incidente refleja la urgente necesidad de buscar mecanismos pacíficos y respetuosos para resolver los conflictos sociales.
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